Limpiar, remover y aplicar

Si tenemos que tratar algún piso queremos que sea lo más efectivo y duradero posible. Les dejamos algunos consejos para sacar provecho al máximo de este proceso

• Limpieza profunda: Eliminar toda la suciedad superficial utilizando limpiadores adecuados para el tipo de piso. Enjuagar abundantemente con agua para eliminar cualquier residuo y dejar secar completamente el piso antes de continuar. Esto es muy importante, se deben respetar los procesos de secado completo en cada uno de los pasos, sino corremos riesgo de dañar los resultados.


• Remoción: Identificar la cera para elegir el removedor adecuado. Aplicar el removedor en secciones pequeñas y controladas con los discos de remoción del tamaño adecuado para su lustradora o lustralavadora. Luego, nuevamente enjuagamos y dejamos secar el tiempo que sea necesario (esto es variable según la humedad del ambiente, se puede ayudar a acelerar el proceso manteniendo el espacio ventilado).


• Reparación: Después de la remoción nos da la oportunidad perfecta para hacer reparaciones pendientes sobre el piso, que también ayudarán a alcanzar mejores resultados.


• Aplicación: Primero elegimos la cera adecuada que se adapte al nivel de brillo deseado. Para aplicar la cera, así como el removedor, es mejor hacerlo de a poco, en este caso la cera de aplica con una mopa en capas finas, y cada una de esas capas debe dejarse secar la mayor cantidad de tiempo posible. Este paso es crucial para que no haya marcas al finalizar el proceso. Una vez que la última capa de cera esté completamente seca, se puede pulir el piso con discos de paño para pulido y así obtener un brillo aún más intenso.